Lobo 2:
Inserción en unos minutos, tienen 1 hora para prepararse, se les entregarán sus instrucciones. Están solos.
Estamos en mitad de la nada, en un valle con un elevado nivel de vegetación, jungla al oeste y pinares al este.
Nos hemos protegido con productos anti parásitos, hemos roto nuestra silueta atando numerosa vegetación a nuestros ghillies y nuestra cara se funde ya con el terreno en colores verde y negro.
Hace calor, entre 28 y 30 grados, la jornada promete sufrimiento.
Orientamos los mapas y nos adentramos en el pinar, 80 metros hacia dentro y salida a la segunda línea de árboles sobre el camino, dirección sur.
Avanzamos lentos, tenemos un objetivo que cumplir y dentro de este se especifica claramente: No ser vistos. Tenemos tiempo hasta las 18:00h.
Escuchamos a otros binomios, las patrullas pasan por el camino, no más de 40 metros a nuestra derecha.
Avanzamos despacio, nos alejamos del camino subiendo una línea más en el pinar, despacio, despacio.
40 minutos después mi observador comienza a labrarse su reputación. El objetivo está a la vista. 100 metros sur – este, es un cartel amarillo con dígitos impresos.
La lectura con nuestros visores es confusa, solo vemos tres dígitos: I T P.
No es posible, la visión no debe ser correcta, es, ha sido, demasiado simple.
Nos aproximamos, 10 metros sobre el camino, John se posiciona y cubre toda el área.
Me desplazo rápido, cruzo el camino y busco una entrada. No tengo tiempo, no se si el claro donde está el objetivo está cubierto por otro binomio. Me arrastro, saco el móvil, lo pongo por debajo del objetivo y lanzo una foto…me arrastro, llego hasta John, me tiro exhausto bajo un matorral.
“16: 30h Lobo 2 para Jefe Lobo…objetivo uno conseguido.”
Dos horas parados, nubes de mosquitos nos rodean, no se posan sobre la piel protegida, pero lo intentan, bajamos la red que cubre nuestras caras
Se acerca una patrulla en un vehículo, no nos movemos los dejamos pasar, estamos aquí para no ser vistos.
Tenemos las coordenadas del segundo objetivo, nos ponemos en marcha, elegimos la opción más larga: 2,5 Km. de rodeo alejándonos del objetivo y otros tantos para llegar a él.
Avanzamos silenciosos por un camino, dirección sur-oeste, que a veces –cubierto por la vegetación – más parece un túnel…aún no ha anochecido, pero hay tramos que carecen de luz, avanzamos despacio, en silencio, tanto que sorprendemos a un guarro de tamaño medio, está hozando tranquilo, en mitad del camino, levanta la cabeza y sale despavorido, tan solo a 20 metros nuestro…somos fantasmas en mitad de una jungla verde.
Pasamos a solo 400 metros del objetivo, sobre nosotros. No importa, la ruta está trazada y no vamos a abandonarla, son las 21:00h, el sudor nos empapa a pesar de que las nubes cubren el sol, es la jungla, sin duda es la jungla. La niebla se cierne sobre el bosque, nos envuelve, ellos no nos ven, nosotros no los vemos.
12:30h luces y voces, rápidos al bosque, cobertura, la nariz pegada al suelo, 5, 10, 15, 20 minutos inmóviles.
John se mueve, nos movemos, avanzamos dispuestos para enfrentarnos a una emboscada, caminamos a la sombra del bosque, despacio, a nuestra derecha aparece el objetivo, no hay patrulla, no hay emboscada. 01:07h segundo objetivo alcanzado, esta vez un pobre globo que cae bajo mis botas, despertando al bosque mientras que nos replegamos en la sombra.
3º objetivo, camino adelante, pegados al borde del bosque, visores nocturnos, cuando la niebla levanta mínimamente, para guiar nuestros pasos, despacio, siempre despacio.
Alcanzamos el punto, son las 04:00h, la niebla continua densa, llueve, no hay visibilidad, no encontramos el objetivo. Informamos y preparamos nuestro vivaque, la estructura del mismo: nuestros cuerpos, la cobertura el poncho. Diluvia, los helechos son más altos que nosotros, somos indetectables. Dormimos, la radio abierta, a la espera.
07:00h Lobo Jefe para Lobo 2 ¿Están en condiciones de buscar el 4º y último objetivo?
Lo estamos, estamos semi-secos (aunque esto va a durar poco) somos un par de abuelos, pero no tenemos fin, coño, no tenemos fin.
Fijamos el objetivo en el mapa de Lobo 2, después lo pasamos al mapa topográfico y una vez realizado esto lo fijamos en el GPS. Solo hay un Km. de distancia, demasiado fácil, desconfiamos, avanzamos despacio dirección norte, cuesta abajo, sigue lloviendo, los ghillies ya no sirven, ahora nos cubren los ponchos, de nuevo por el camino, por el limite del bosque, con la vegetación a la altura de la cintura, a estas alturas calados hasta los huesos, somos fantasmas en mitad de una jungla verde.
Una patrulla en coche subiendo, no nos ven, van cargados de soldados, cabrones, no os mojáis.
Avanzamos y descubrimos pronto nuestro último objetivo, de nuevo coordenadas en esta ocasión EZP. Lo fotografiamos, cubrimos la posición e informamos a Lobo Jefe. No hay transporte, nos envían a 500 metros dirección norte, camino abajo.
Nos movemos y el coche con la patrulla nos sorprende tras superar una rasante del camino, saltamos al bosque, 50 metros, ahora ya no sirve pegar la nariz al suelo, posición defensiva, dispuestos a vendernos caros.
5, 10, 15, 20 minutos, el protocolo es vital, nada de nervios. Nos movemos atravesando el bosque, salimos al camino: Ni rastro de la patrulla, diluvia, cabrones, no os mojáis, y eso os salva la vida.
Seguimos bajando el camino, detectamos a un binomio subiendo, de nuevo al bosque, el insecticida ya no está activo, las arañas suben por la pierna. El francotirador llega a nuestra altura, John le encañona, no más de 8 o 10 metros, le apunto con mi rifle y le interpelo ¿Estás muerto o te disparo? Levanta tímidamente una mano, suficiente para darse por muerto, insuficiente para que su observador lo vea –juega limpio sin duda- su observador lo alcanza, misma frase, levanta la mano y toman el camino de regreso, están eliminados.
15 minutos más tarde comunicamos con Lobo 2, nos asegura que la entrada a la base está despejada, avanzamos cautos, -aún no sabemos que somos los últimos en pié- son aproximadamente las 10:00h el evento ha concluido.
Sniper Hunter y Tierra de Lobos, dos eventos para francotiradores, dos ocasiones únicas de probarnos a nosotros mismos, somos un par de abuelos, pero no tenemos fin, coño, no tenemos fin. Somos fantasmas en mitad de una jungla verde,
Observador John, ¿Para cuando la siguiente misión?
